Acoso a la mañana.
Me revuelco.
Castañeo los cabellos en la almohada.
En mi almohada.
La cúspide de todo lo irremediablemente uraño.
El estrepitoso margen del rocío.
miércoles, 18 de febrero de 2009
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1 comentario:
Bien, bien.
Sutil, tranquilo.
Nada entrañable.
(Chale.creo que ya perdí el toque)
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