lunes, 2 de mayo de 2011

Fernanda

Un bultito de carne. Un calor que se desprende y se une al de mis propias entrañas. Brisa de mar. Olas que escapan, se enmoronan y se aplastan pero llegan, redondeantes, a la mar. Cuerpo suave, sudoroso y ondulante. Agua de una fuente que no es mía pero corre hasta mi seno. Agua. Hilito de agua, pequeña piedra de río, plumita de quetzal.
Has llegado.
Llegaste.
Te veo crecer, chorrito de agua entre la tierra, esta tu tierra. Y tú me ríes desde tus más abiertas profundidades, desde esta tu claridad tan agua. Y me vas cubriendo, manantial pequeño, con tus ramas.
Has llegado.
Llegaste.
Se me llena el cuerpo.


Feliz segundo aniversario, Fernanda.